A finales de enero tuvimos el privilegio de asistir a la apertura, tras la rehabilitación y ampliación, de las bodegas centenarias de Osborne situada en la calle Los Moros del Puerto de Santa María. Pudimos comprobar que el efecto ha sido la creación de un enclave inigualable, dando como resultado un panorama de estilo moderno pero manteniendo la tradición, que caracteriza gran parte del lugar.

Comenzamos la visita accediendo a través del patio del Magnolio a la bodega de los vinos de Jerez, dónde se ha mantenido el estilo clásico, rodeado de historia y con un encanto notable gracias a la disposición de las botas y el juego de luces creando un entorno único. A continuación paseamos por la bodega hasta llegar a la Toro Gallery, siendo éste un espacio mucho más moderno y de contenido cultural, donde se recopila la historia del toro, así como de la empresa y la familia, contando desde su origen hasta la actualidad y dando a conocer su impacto en todos los ámbitos, entre ellos la moda y la publicidad.

Tras esto, pasamos a la visita de espacios más exclusivos, situados en La vieja. Como es el Toro Club, un espacio recogido, cuidado al milímetro y que pretende hacer alusión al origen británico de Osborne. Justo al lado de esta se encuentra la sala de catas, siendo un lugar exquisitamente decorado y cuidado, dotando al cliente de intimidad en un espacio de diseño.

La siguiente parada fue la Toro Store, aunque la temática está clara, la variedad de productos era amplia y muy exclusiva, desde modalidad textil y complementos, a vinos o detalles como llaveros. Que tras cruzar la recepción nos llevó finalmente al restaurante denominado Toro Tapas, un lugar dónde degustar los sabores típicos de Cádiz, en donde se esconde un reservado de lo más peculiar, pues se encuentra escondido tras un expositor de botellas.

Tras nuetra experiencia, podemos asegurar que no te defraudará y que es un lugar único para los amantes del vino, el toro y el buen jamón.

Mª Isabel Rodríguez Martínez
Graduada en Marketing y Turismo